Preparación:

Precalienta el horno a 200º
 

En un procesador de alimentos, tritura el calabacín y la cebolla hasta que quede muy muy bien triturado
 

En un bol grande, añade la mezcla de calabacín y cebolla. Ahora es momento de añadir la harina de garbanzo. Te recomiendo que lo hagas poco a poco y removiendo muy bien para evitar que salgan grumos. Después añade el resto de ingredientes. No te olvides de la sal. La mezcla quedará algo húmeda, no te preocupes.
 

En una bandeja de horno coloca papel vegetal e ir cogiendo trozos de masa con una cuchara o un sacabolas de helado. En cualquier caso, ve dejando las porciones separadas unas de otras y sobre papel vegetal. A mí me salieron unas 18.
 

Hornear durante 20 min, vuelta y vuelta. Una vez listas, dejarlas enfriar sobre una rejilla para que no cojan humedad y… ¡Listo!